Ellos también importan 

01.04.2017

Cuando una empresa actúa responsablemente, tiene en cuenta a todos sus grupos de interés, hasta ahora el sistema tradicional capitalista ha tenido como principal grupo de interés al inversor, al socio capitalista, y que duda cabe que sin él, no se dispondría del capital inicial para emprender cualquier proyecto empresarial. 

Una perspectiva diferente

Efectivamente el socio inversor es una figura capital, pero no es el único grupo de interés; no es el único ni tiene porqué ser el más importante. 

Lo primero que tiene que hacer una empresa para implantar un sistema de gestión basado en medidas de responsabildad social, es determinar los distintos grupos de interés y evaluarlos convenientemente, tanto por orden de importancia como para poder mitigar posibles riesgos de vulneración de derechos sociales, laborales, de derechos humanos y medioambientales.


Una minuciosa definición de todos los grupos de interés

Tal y como veis en la imagen, varios niños están alrededor, cada uno de ellos tiene su papel, alguno más cerca, otro mas lejos, unos podrían influir más, otros menos, pero todos ellos participan de la observación del objeto ante su vista y para todos ellos podría tener consecuencias si al objeto le pasara algo, saliera volando, explotara, o echara algun líquido perjudicial.

Una gestión responsable en la empresa aboga por la participación de todos los grupos de interés, en donde la comunicación ha de ir en los dos sentidos, con cierta retroalimentación y en donde se puedan determinar las incidencias que puede tener la actividad empresarial en cada uno de esos grupos de interés que participan directa o indirectamente de la misma. 

Por eso, la retroalimentación, es algo básico y fundamental, porque si no tratamos con todos los grupos de interés, no podemos determinar cualquier riesgo que se nos haya pasado por alto y que sólo acabaríamos conociendo a través de esa retroalimentación.

Os comparto esta imagen  de la web de https://todoimagenesconfrases.com/

Esto es clave, estamos acostumbrados a atender al consumidor quejoso, por ejemplo, para darle la respuesta en función de lo que nos ha reclamado pero nos olvidamos de algo tan básico como es entender que es lo quiere decirnos. Y ahí es cuando metemos la pata.

Y lo mismo pasa con la comunidad local, cuando se nos ocurre poner una fábrica en una zona concreta, en estos casos,  a veces ni preguntamos, y si se da cierta comunicación, no hemos caído ni siquiera en la cuenta que se trata de un grupo de interés. Y es que eso, sencillamente, no estaba en nuestros planes. De ahí lo de tener " una perspectiva diferente".

Porque sí, es un grupo de interés, un grupo de interés que a veces no es influyente pero si es de vital importancia, porque puede ser uno de los más afectados por la violación de derechos humanos y sociales. Y eso no tenemos que perderlo nunca de vista. 

Ellos también importan.